Battleground Bulletin: Trump no puede dejar de jugar a la defensiva, pero este juego aún no ha terminado.

July 06, 2020

No hay manera de ignorar la verdad: las cosas no van bien para Donald Trump.

A medida que el país continúa enfrentando crisis en múltiples frentes, los  estadounidenses han tenido que sufrir el liderazgo fallido del presidente. Los números no mienten: con los índices de aprobación en picada y un número vertiginoso de estadounidenses que creen que el país va por el camino equivocado, las perspectivas de reelección de Trump nunca han sido tan sombrías.

Por lo tanto, no debería sorprendernos que, a solo cuatro meses de las Elecciones, la campaña de Trump se atasque tratando de defender desesperadamente los 270 votos electorales necesarios para ganar las elecciones. En vez de cumplir sus promesas de liderar en estados como Nuevo México y Minnesota, Trump malgastó en los estados que ganó en el 2016 mientras su lugar en las encuestas ha empeorado, además de un pánico interminable y agitación en su personal de campaña.

En un momento en que su esfuerzo para la reelección reelección debería estar presionando para solidificar su apoyo hacia un impulso en otoño, la campaña de Trump siempre se encuentra lidiando con heridas autoinfligidas. No precisamente una receta para el éxito.  

Y como cualquier fanático del fútbol reconoce, es difícil ganar si no puedes sacar tus defensas del campo.

Los gastos de Trump representan una campaña a la defensiva.

En base a cómo Trump ha estado gastando, su campaña sabe que está perdiendo. 

Además de los gastos previstos en televisión en estados clave electorales bastante disputados como Florida, Michigan, Pensilvania y Wisconsin, la campaña de Trump también ha gastado mucho para publicar anuncios de televisión en Arizona, Carolina del Norte, Iowa y Ohio: cuatro estados donde la mayoría de los observadores decían que Trump ganaría fácilmente a principios de este año. Sus compras se han expandido aún más en las últimas semanas, ya que la campaña ahora está ocupando lugares en Georgia que han sido históricamente abrumadoramente rojos.

Parece que la campaña de Trump no tiene mucha confianza que su reciente ola de gastos logre que vuelva a tener una mejor posición en la carrera. Cuando la campaña comenzó a hacer reservas de televisión para el otoño la semana pasada, las empresas de análisis de anuncios rastrearon grandes reservas en antiguos bastiones republicanos, incluidos Arizona, Carolina del Norte y más de $18 millones en Ohio. Es bastante obvio que gastar tanto dinero es un intento desesperado para poder recuperar su ventaja en la carrera en los estados que el presidente ganó por 8 puntos hace sólo cuatro años no estaba en su presupuesto original.

 Estas no son las movidas de una campaña en modo ataque. Son las señales de un candidato desesperado por seguir en la carrera. 

Las encuestas muestran que Trump está perdiendo en prácticamente todos los estados clave electorales.

 A pesar de que la campaña originalmente anunció que iba expandir el mapa electoral del presidente en el 2020, el mapa de Trump parece estar disminuyendo más cada día. La manera en la cual ha estado gastando en publicidad se explica fácilmente por su posición en las encuestas de opinión pública.

A medida que el público rechaza su liderazgo incompetente durante la crisis del coronavirus y su fea reaccion a las protestas nacionales contra la brutalidad policial, cualquier esperanza que Trump pueda haber albergado para ganar en los estados que Hillary Clinton ganó hace cuatro años se ve aún más improbable. Las encuestas más recientes muestran que Trump enfrenta un gran déficit en estados como Nevada, New Hampshire y Minnesota, todos los cuales Clinton ganó por menos de dos puntos y medio en el 2016.

Sin poder jugar a la ofensiva, su defensiva tampoco ha sido muy efectiva. En los cuatro estados clave electorales que Trump ganó por un punto o menos en el 2016 (Florida, Michigan, Pensilvania y Wisconsin) y con los cuales logró asegurar la presidencia, hoy en día Biden le lleva entre 6 y 10 puntos a Trump. Es importante tener en cuenta que estas ventajas podrían reflejar una marca alta para Biden y es probable que los resultados se vayan ajustando a medida que nos acercamos a noviembre. De todas maneras, este es un lugar indudablemente malo para Trump ya que sólo faltan 121 días para la elección. Y no hay manera que el presidente gane la elección este año sin ganar en estos estados.

Los problemas de Trump no terminan aquí. El apoyo de Trump sigue minando más allá de sus estrechas victorias y ahora está poniendo en peligro una amplia sección de estados donde ganó con bastante comodidad. FiveThirtyEight muestra a Biden con una ventaja de 4 puntos en Arizona y una ventaja de 3 puntos en Carolina del Norte, en promedio, después de que Clinton perdió a ambos estados por aproximadamente 4 puntos en 2016. Y Trump también continúa con un rendimiento inferior en los estados tradicionalmente rojos donde inicialmente se esperaba que volviera a ganar sin ningún problema en 2020, como Georgia, Ohio, Iowa y Texas, donde Trump ahora se encuentra empatado o perdiendo.

La campaña de Trump puede seguir saliendo con cuentos y explicaciones sobre los resultados de las encuestas (y ya lo ha hecho), pero los datos no mienten: hoy Joe Biden está expandiendo su apoyo cada vez más y su camino a la presidencia se ve más probable, mientras que el terreno de Trump está desapareciendo bajo sus pies.

 Trump puede estar atrás, pero aún queda camino por recorrer y mucho trabajo por hacer.

Para quedarnos claros, nada de esto es para decir que esta carrera está cerca de terminar, ni mucho menos. Si bien Trump puede estar caído (y ciertamente no se está haciendo ningún favor a sí mismo), todavía queda mucho tiempo para que su campaña mejore su posición.

El clima político era muy diferente hace cuatro meses que lo que es hoy, y podría verse mucho más diferente aún dentro estos cuatro meses hasta el día de las elecciones. Y con Trump y sus aliados republicanos comprometidos a hacer todo lo que esté a su alcance para suprimir el voto y obtener cualquier ventaja posible, sin importar el costo a nuestra democracia, los demócratas deben permanecer completamente enfocados y constantemente vigilantes. 

 Simplemente queda demasiado tiempo para que los demócratas siquiera piensen en relajarse. Es por eso que Priorities USA y nuestros aliados continuaremos presionando nuestra ventaja y haciendo todo lo posible desde ahora hasta noviembre para garantizar que, cuando se cuenten todos los votos, Donald Trump sea un presidente de un solo mandato.

Anunciamos recientemente que hemos ampliado significativamente nuestra inversión en anuncios en Arizona, con más de $1 millón invertido sólo en el mes de julio.

La ventaja de Donald Trump en Arizona (un estado tradicionalmente rojo) se está evaporando rápidamente y Priorities no ha perdido tiempo en aprovechar la vulnerabilidad del presidente. Priorities está haciendo inversiones importantes para alcanzar a la comunidad latina de Arizona, que se ha visto desproporcionadamente afectada por el fracaso de Donald Trump en contener la crisis del coronavirus.

Priorities sigue gastando casi $2 millones por semana en publicidad digital y televisiva en estados clave electorales. Hemos recaudado casi $173 millones para este ciclo, y nos comprometemos a invertir más de $200 millones para derrotar a Donald Trump y garantizar que Joe Biden sea nuestro presidente.

DONALD TRUMP ESTÁ EMPEORANDO LA PANDEMIA 

Mientras que otros países están frenando las infecciones del coronavirus y reabriendo sus economías de manera responsable, el gobierno de Donald Trump ha perdido el control meses después de la aparición del virus. Podríamos haber evitado esto. La ignorancia, la incompetencia y la imprudencia de Donald Trump están dañando innecesariamente a millones de estadounidenses. 

Mientras los casos vuelven a surgir, Donald Trump está organizando eventos de campaña y alardeando sobre reducir las pruebas del virus, todo para alimentar su propio ego a costa de la salud del pueblo estadounidense. “Transmit” se está emitiendo en televisión en los estados clave electorales, y responsabiliza a Trump por no poner al pueblo estadounidense por delante de sus intereses políticos.

El último anuncio digital de Priorities USA Action, “Go Away“, enfatiza las repetidas y deliberadas mentiras de Donald Trump al pueblo estadounidense, y responsabiliza a Trump por difundir información falsa en tiempos de crisis.

LOS VOTANTES LATINOS QUIEREN UN LÍDER DE VERDAD, Y DONALD TRUMP NO LO ES

El fracaso de Trump en liderar durante la crisis del coronavirus ha perjudicado desproporcionadamente a los latinos. El último anuncio en español de Priorities, “Basta“, está dirigido a las comunidades latinas de Arizona y la Florida. En lugar de unir al país durante un momento de crisis, Donald Trump ha optado por crear más división y caos.

“Basta” se transmite en español e inglés en la Florida y Arizona como parte de nuestra inversión ampliada en el estado del Gran Cañón.